Archivo mensual: diciembre 2010

Saudade

Iba a escribir una entrada acerca de los simbolismos personales que uno construye con lo que tiene a la mano, pero me distraje con la imagen de los copos de nieve que caen por el monitor mientras tecleo esto, gracias a la interfaz de WordPress.

No conozco la nieve. Hace unos dieciocho años, acaso veinte, fui de vacaciones a las faldas de La Malinche (un volcán tlaxcalteca) con otros ocho miembros de la familia. No era la primera vez que íbamos, no era la primera vez que subíamos casi hasta la cúspide; pero ese día no quise hacer el trayecto completo. Cuando descendíamos me contaron que había nevado y allá arriba todo estaba cubierto de blanco.

No conozco la nieve, sin embargo, siento una profunda melancolía por ella, que no se basa en ningún recuerdo. La he visto en fotos, en películas, he leído de planicies europeas en invierno, pero nada más. Tengo una certeza: algún día veré nevar, es más, voy a estar a la intemperie mientras la nieve comienza a caer: sentiré su toque frío, mullido, suave; algún día voy a estar con la nieve y voy a reconocerla. No sé cómo ni por qué, cuando tengo esta añoranza concluyo que el día de mi encuentro con ese blanco llegará.

Me reconforta imaginar un escenario nevado, silencioso, en el que pueda sentarme a contemplar cómo el mundo se pone en pausa, mientras respiro un aire claro, muy frío acaso y miro un cielo limpio, azul. Ese escenario, que imagino con mucha nitidez, puede estar lejos o cerca en el tiempo, pero sé que, cuando esté allí, habré llegado al origen de esta añoranza.

2 comentarios

Archivado bajo Apunte, Escrito